domingo, 12 de abril de 2015

QUE LOS POLÍTICOS SE PRONUNCIEN EN MATERIA DE BIBLIOTECAS



Las bibliotecas de Castilla-La Mancha piden un pronunciamiento claro de los políticos.

Reducciones presupuestarias, ceses y cierres de bibliotecas hacen que las Asociaciónes de Bibliotecarios de la región insten a los partidos políticos que concurren a las elecciones para que expliquen claramente cuáles van a ser sus propuestas.


El cierre de bibliotecas municipales, despidos de personal, la desaparición de las líneas de ayudas a bibliotecas municipales, reducciones presupuestarias de hasta un 80% y el despido del 100% del personal interino en Bibliotecas Públicas del Estado, ha llevado a las asociaciones de Bibliotecarios de Castilla-La Mancha a instar a los diferentes partidos políticos que concurren a las elecciones para que se pronuncien y expliquen claramente cuáles van a ser sus acciones en materia bibliotecaria que, en caso de acceder al gobierno regional, vayan a realizar con el fin  despejar la incertidumbre actual.

Consideran que la situación a la que se ha llegado es insostenible ya no solamente por todos los recortes y despidos que se han producido sino porque no hay un pronunciamiento claro de qué medidas se van a tomar en el futuro para poder revertir la situación actual que afecta a los trabajadores y también a los usuarios pues, por ejemplo, en muchas de las bibliotecas municipales hace años que no se adquiere ninguna nueva publicación por falta de ayudas y de inversión. En otras se han despedido a los bibliotecarios y se han sustituido por personal no cualificado y otras sin más han cerrado, lo que está repercutiendo directamente ya no solamente en la calidad del servicio sino, directamente, en los usuarios.

Las asociaciónes de bibliotecarios de Castilla-La Mancha, recuerdan la importante labor de disponer de un buen servicio de bibliotecas para la sociedad ya que son centros para la formación y el aprendizaje, para la adquisición de conocimientos, para la animación a la lectura y para la introducción de la población en las nuevas tecnologías contribuyendo así a la reducción de la brecha digital. Y es que las bibliotecas se han convertido, en la actualidad, en verdadero motor cultural de los municipios así como lugares de ocio alternativos que facilitan el aprendizaje y permiten la cohesión social de sus usuarios. Todo ello reconocido por organizaciones internacionales como la UNESCO